Los libros de Cutler

Para entender de qué va todo esto las referencias principales son dos libros de Andrew H. Cutler. Son fundamentales, sobre todo el primero:

Amalgam Illness: Diagnosis and Treatment

Hair Test Interpretation.

miércoles, 26 de mayo de 2010

Últimas rondas

Las últimas rondas han ido mejorando progresivamente. El primer día de cada ronda ha sido un poco  difícil, pero el resto de los días me he sentido estupendamente. Esto me ha animado a hacer la última ronda, en la que todavía estoy, más larga. Hoy es el quinto día y, como me siento muy bien, es posible que intente continuar. Imagino que finalmente vendrá el dolor de cabeza y tener que parar.

Hablando de dolores de cabeza, he tenido uno suave, pero persistente, en los días OFF entre rondas que desaparecía al empezar a quelar. Así que tengo dos tipos de dolor de coco, que se sienten de forma distinta. Cuando quelo con dosis muy altas o mucho tiempo, acaba apareciendo uno que se corrige o alivia tomando bebidas isotónicas y que tiene que ver con el orinar demasiado frecuentemente. El otro, en cambio, no se corrige ni con bebidas isotónicas ni con aspirinas y lo elimina la quelación. Curioso.

jueves, 6 de mayo de 2010

Más de lo mismo

No ha habido variaciones en la rutina de la quelación. La última ronda, de viernes a domingo espesó los sesos y me cansó un poco, soportablemente. Un pequeño progreso: no he tenido ni rastro de dolor de cabeza a pesar de no tomar nada de bebida isotónica. Después he pasado unos días de descanso bastante buenos en los que a ratos puedo volver a pensar un poco.

Ha habido algún microbio por mi alrededor que al final ha venido a visitarme. Como mi sistema inmunitario funciona, se está quedando en una molestia en la garganta que parece ir a menos, casi nada ya. Por prudencia, no empezaré ahora la ronda,  que ya escarmentado estoy.

Lo peor ha sido un mensaje de Cutler en el que reconoce que no está completamente detoxificado y aún tiene algún problema de alergia. Dado que él comenzó hacia el año 98, la idealizada salud perfecta a la que uno secretamente aspira se convierte en mito inalcanzable.

Relativicemos las cosas: es posible que Cutler no haya podido terminar por, como el dice, "diversas cosas de la vida" y que otros terminen. Aunque todos tenemos diversas cosas en la vida, así que si él no acaba no sé por qué voy a hacerlo yo.

Pero aunque no se pueda terminar nunca este penar, sí es posible conseguir un nivel de salud bastante razonable, sobre todo comparado con la larga miseria vivida. Por tanto, creo que debo considerarme crónico en adelante, con la suerte de que la quelación me arregla mucho, las rondas tienden a ser cada vez menos duras y hay cierto lento, ahora muy lento, progreso. 

Y como no se me ocurre nada mejor que hacer y esto funciona, aunque no acabe, aquí seguiré con mi rollo. Eso sí, si un día termino, os invito a todos a comer.