Voy a empezar a preparar cápsulas con 100 mg de ALA para empezar una ronda esta media noche.
Es un paso un poco arriesgado, porque lo suyo sería intentar 75 mg después de haber hecho 50 mg, pero uno siempre encuentra razones para hacer el mico. En este caso, resulta que ahora tengo unos días en los que creo que me puedo permitir estar muy cansado, si no queda más remedio. Así que si me doy un porrazo, pues será sólo cuestión de parar y recuperarse, recomenzando más tarde con 75 mg.
En las dos últimas rondas con 50 mg me parece haber visto progresos claros al terminar la ronda. Si hubiese suerte y pudiese soportar los 100 mg la cosa iría bien encaminada y empezaría a apostar seriamente por una recuperación rápida (digamos, un año desde que me quité las amalgamas, lo que sucederá por las próximas Navidades). Si tengo que quedarme estancado en 50 mg preveo que entonces tarde más, dos o más años.
Pero todo esto son imaginaciones. Voy a hacer cápsulas.
La idea es ir contando qué tal me va tratando de seguir el protocolo de desintoxicación de mercurio de Andrew H. Cutler. Este blog no pretende dar consejos médicos: yo no lo soy y probablemente me equivoque en muchos aspectos. Por cierto, si ves que lo hago, agradeceré que me lo digas y por qué. La información que aquí se da podría incluso estar en contradicción con el propio protocolo de Cutler, por ejemplo por haberla entendido yo mal, así que mucho ojo.
Los libros de Cutler
Para entender de qué va todo esto las referencias principales son dos libros de Andrew H. Cutler. Son fundamentales, sobre todo el primero:
Amalgam Illness: Diagnosis and Treatment
Hair Test Interpretation.
Amalgam Illness: Diagnosis and Treatment
Hair Test Interpretation.
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