Después de las primeras 8 dosis de 12.5mg de DMSA + ALA cada 3h me siento cansado. He salido a dar un paseo, pero resisto poquito andando. Las tareas sencillas, como cocinar u ordenar algunas cosas de la casa me parecen agotadoras.
Además, tengo un poquito de reflujo gástrico -acidez- que parece que es normal con el ALA. Es soportable por el momento. Tengo muy poco apetito y a veces una cierta sensación de estar colocado, bastante leve y no alarmante. No he tenido más problemas de sueño por el momento.
La idea es ir contando qué tal me va tratando de seguir el protocolo de desintoxicación de mercurio de Andrew H. Cutler. Este blog no pretende dar consejos médicos: yo no lo soy y probablemente me equivoque en muchos aspectos. Por cierto, si ves que lo hago, agradeceré que me lo digas y por qué. La información que aquí se da podría incluso estar en contradicción con el propio protocolo de Cutler, por ejemplo por haberla entendido yo mal, así que mucho ojo.
Los libros de Cutler
Para entender de qué va todo esto las referencias principales son dos libros de Andrew H. Cutler. Son fundamentales, sobre todo el primero:
Amalgam Illness: Diagnosis and Treatment
Hair Test Interpretation.
Amalgam Illness: Diagnosis and Treatment
Hair Test Interpretation.
sábado, 19 de abril de 2008
2 comentarios:
Por favor, los comentarios, dudas, etc. dirígelos a
quelaciondedosisfrecuentes.info
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Espero no invadir tu intimidad pero me gustaría saber si te sientes comprendido y apoyado por los que te rodean....yo solo siento una falta de empatía total!
ResponderEliminarYo creo que el problema es que no parecemos estar tan malitos como, de hecho, estamos. Esto, junto con el que no haya un diagnóstico estandarizado, hace muy difícil para la gente que nos rodea el comprender.
ResponderEliminarPor no hablar de los problemas cognitivos, que son tan difícilmente objetivables.
Tengo la suerte de tener una pareja muy comprensiva. Además tengo unos niños maravillosos que, cuando me ven malito, me preparan kudzu para que mejore. Mi situación en este aspecto creo que no es muy mala. Pero sé que para muchos es un problema añadido enorme.